Es un bebé dulce, encantador y lleno de magia. Estamos todos enamorados de él.
Vino al mundo en nuestra casa. Después de horas de parto, largo y renacedor, acompañada por mis seres queridos pudimos ver su carita hace ya algo más de dos meses.
Ahora nos encontramos sumidos en unas vacaciones extrañas entre abrazos, miradas cercanas, pañales y teta. Y las llamo vacaciones extrañas por que aunque me pasaría las horas oliendo a mi dulce angelito con el reloj muerto ante mi, me remueven sentimientos complicados por no estar ofreciéndole a nuestra hija las mismas cosas que antes.
Pero todo llegará, volveremos a retomar la acción antes o después. De momento me dejaré llevar por las maravillosas sensaciones que me invaden estrechando fuerte contra mi pecho a nuestro nuevo hijo.
Nuestra Princesa está disfrutando del verano acompañada de sus amigos y de sus titas. ¡Y del nuevo miembro de la familia!. Lo achucha, lo besa, le canta, lo mira, está loca con él. Es una hija increíble.
1 comentario:
Enhorabuena por esa preciosidad!! Disfruta al máximo de tus dos peques, qué bonito!
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