A una amiga en la primavera pasada le regalaron gusanos de seda y los observaron crecer, fabricar sus casitas de seda, salir vestidos de mariposa, poner su huevitos, crecer y morir.
Esos huevos permanecían aún en una caja esperando el mometo de volver a comenzar su ciclo vital. ¡Y nos la han regalado!. Ahora será nuestra familia la que disfrute de ver este mágico fenómeno de la naturaleza.
Ya una vez encontramos una crisálida, la recogimos y salió de ella una espectacular mariposa, "De oruga a mariposa" , pero I. no pudo observar el proceso anterior. Así que esta vez será un gustazo para ella poder admirar el proceso en toda su evolución.
Ahora nuestros Bombyx mori (nombre científico de estos insectos lepidópteros) están en la primera fase de su vida:
Esos huevos permanecían aún en una caja esperando el mometo de volver a comenzar su ciclo vital. ¡Y nos la han regalado!. Ahora será nuestra familia la que disfrute de ver este mágico fenómeno de la naturaleza.
Ya una vez encontramos una crisálida, la recogimos y salió de ella una espectacular mariposa, "De oruga a mariposa" , pero I. no pudo observar el proceso anterior. Así que esta vez será un gustazo para ella poder admirar el proceso en toda su evolución.
Ahora nuestros Bombyx mori (nombre científico de estos insectos lepidópteros) están en la primera fase de su vida:
Son diminutos, de color negro y algo peludos y llevan todo el invierno en sus huevos sin comer. Para poder salir se comen parte de él ya que su cáscara es muy nutritiva y se van a toda prisa a las hojas tiernas de morera para seguir alimentándose. Al cabo de tres o cuatro días realizan su primera muda de piel y de algunos órganos, entre ellos las mandíbulas. Conforme sigan creciendo irán incluyendo e n su dieta hojas más duras del árbol de la morera.
De momento los únicos cuidados de estos nuevos compañeros de viaje son proporcionarles un lugar cálido y tranquilo y hojas frescas tiernas de morera bien lavadas para asegurarnos de que no tienen insecticidas, colocándolas encima de las que ya están secas, por la cara interior (la de las venitas), hacia abajo, para que les resulte más fácil comérselas.
Hemos aprendido que para respetar y no dañar el árbol del que nos surtimos debemos no cortar ni romper ninguna rama, no cortar las hojas del final de estas y no dejar ninguna sin hojas.
I. está observando el interior de uno de los capullos que llegaron en la caja. Algunos tenían mariposas sin terminar de formar muertas en su interior.
Ahora a continuar contemplando el crecimiento y la transformación de estos insectos.
Mami.
2 comentarios:
Justo ayer le comentaba yo a mi marido que a ver si podíamos conseguir algunos gusanos para que nuestro hijo pudiese observar este ciclo.
Me parece una excelente experiencia.
Saludos
hola, hola si os sobran algunos nosotras tambien queremos!!!!!!!
Inés, Olivia y Rocío
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