Flores por San Valentín

No soy muy dada a celebrar este evento, ya que no puedo dejar de creer que es un puro invento consumista. Pero con una niña de cuatro años, estas fechas entran en su vida aunque no seas tú la responsable directa. Un anuncio de la cadena comercial LIDEL ayer y esta mañana hemos amanecido hablando del ramo de flores que teníamos que regalarle a papá.
Y bueno, como no hay mal que por bien no venga, ya tenía la escusa perfecta para decorar con flores nuestro pequeño hogar.

Hemos hecho unas sencillas flores con papel de seda y pajitas y las hemos colocado en un tarrito decorado con arroz pintado. Además I. ha hecho un cuadro de San Valentín con rollos de papel.
Fácil y divertido, aunque no tan fácil conseguir hacerlo sin que los materiales llegasen a todos los rincones de la casa con P. rondando a nuestro regazo. ¡Es todo un reto esto de tener dos hijos y educar en casa!

Para hacer las flores doblamos una hoja de papel de seda en seis partes iguales, y luego cada una de ellas en diagonal tres veces más. En uno de los bordes dibujamos los pétalos y recortamos. Abrimos los pétalos y los pinchamos uno a uno sobre la pajita. Nosotras hemos puesto un trozo de lana atado arriba y abajo de los pétalos para que estos no se deslizasen. Hemos recortado el extremo superior de la pajita en cuatro trozos y los hemos doblado para que diese sensación de estambres. Hemos decorado con purpurina y hemos acabado rociando un poco de perfume.

El arroz lo hemos puesto en varios tarros en pequeñas cantidades y con un pincel y temperas de colores lo hemos removida hasta que ha quedado perfecto. Después sólo hay que trasvasarlo con cuidado al recipiente final.

Un rollo de papel higienico doblado con forma de corazón y sujeto con celo para que no pierda la postura, se usa a modo de sello con temperas para hacer el sencillo cuadro de corazones.

¡Feliz día a todos!

Mami.